Las mujeres defectuosas
Inicié mi residencia allá por mayo, y otra de las cosas que más me sorprende a día de hoy es la cantidad de mujeres que responden “Sí, si puedo quería” a la pregunta de “¿Vas a dar pecho?”.
Al principio me asustaba, claro, yo no conocía a ningún monstruo que viniese a quitarle la leche de las tetas a las mamás, ni nunca había estudiado nada sobre una alerta de salud a nivel mundial que me hablase de que las mujeres se estaban quedando sin leche. ¡Menuda faena!
Menos mal que las mujeres se habían quedado sin leche ahora -pensaba- que ya tenemos leche artificial, para que nuestras crías sobrevivan , ¡si llega a ser hace unos años nos hubiésemos extinguido!
Claro que seguí con mis indagaciones sobre las mujeres que sólo daban el pecho si podían. Y seguí preguntando, porque mi abuelo dice que si preguntas quedarás de tonta una vez, pero si no, quedarás ignorante toda la vida. Y preguntaba, y preguntaba…y resulta que no existía tal monstruo. Ni ninguna alerta mundial sobre hipogalactia…y entonces seguí preguntando y preguntando para llegar a algunas conclusiones:
Resulta que las mujeres, hoy en día, tienen la leche aguada. También hay otras que les pasan los gases a través de la leche a sus bebés, y eso es tremendamente malo. Otras mamás simplemente no tienen leche, y es que sus madres ya no tenían, y lloraban muchísimo porque se sentían fatal criándolas cuando se veía a leguas que no engordaban bien, que ya se lo decía todo el mundo.
Algunas mamás es que tienen los pezones que no valen para mamar. Otras tienen poco pecho, entonces no les llega a sus bebés. Otras, mientra tanto, tienen demasiado, entonces es demasiado grasiento y a sus bebés no les gusta.
Encontré tantas y tantas mamás que tenían algún defecto que estuve a punto de escribirle a la OMS. ¿Cómo era posible que estuviese pasando algo tan tan grave y nadie tomase medidas? ¡Acabo de terminar la carrera y a mi nadie me ha hablado de esta amenaza de hipogalactia!
Pero recapacité…antes de escribirle a nadie seguí pensando…que cosa más rara que sólo ahora vengan las tetas mal de fábrica…
Me pregunto qué pensaría una adolescente si le preguntase si va a ser capaz de menstruar. O a un adulto que lleva tiempo siendo feliz, si sería capaz de llorar. A ver si tiene lagrimales o no. Porque puede que no los tenga. Tendré cuidado a partir de ahora si le pido la hora a alguien, por si no tiene brazos en los que ponerse el reloj. Porque puede que no los tenga. No se, empiezo a pensar que esto de que las mujeres no tengan leche igual tiene que ver con el tema de que las mujeres somos un poco defectuosas. Siempre lo hemos sido.
Tienes ojeras, maquíllate. Tienes pelo en las axilas, depílate. Tienes estrías, cúbrelas. Tienes pechos, sujétalos. Tienes barriga, ponte a dieta. Tienes poca altura, ponte tacones. Tienes la cintura ancha, encorsétate. Tienes un mal día, sonríe.
Con todos estos requisitos, lo raro sería, que con dos tetas pudiésemos dar leche así, sin más. ¡Sin ningún otro producto! ¡Ala! ¡Cómo si fuese lo más normal del mundo vaya! ¡Que una mujer amamante!
Que no nos quiten ningún derecho más. Qué este, también es nuestro.
Gracias a la maravillosa mamá que me permitió acompañarla en su parto y compartir con vosotras esta preciosa fotografía sobre la lactancia.
El perdón de las mujeres
He observado desde que estoy en el paritorio, un sitio en el que entro en contacto con, como mínimo, 3 o 4 mujeres embarazadas al día, además de con todas mis enormes compañeras, desde matronas, ginecólogas, auxiliares, limpiadoras,…la inmensa mayoría mujeres, algo que quiero compartir. Tengo también grandísimos compañeros hombres, por supuesto. Pero hoy quiero hablar de las mujeres.
Quiero escribir sobre el perdón de las mujeres.
Las mujeres, ese ser maravilloso que durante unas 37 semanas ha prestado su cuerpo a una nueva persona, para que se pudiese llegar a serlo. Que viene con las piernas hinchadas, edematosas, a quien le cuesta caminar. Que ha tenido durante 12 semanas vómitos cada mañana, pero se limpiaba la cara, y se iba a trabajar. Que tomaba rigurosamente sus vitaminas, que no tomaba ni una caña a pesar de lo muchísimo que le apetecía; que se ha cansado de repetir “por favor, no fuméis aquí, que le sienta mal al niño”. Que estaba 10 horas en la barra del bar con camisetas holgadas y la espalda cargada. Que estaba tecleando frente al ordenador y haciendo números para comprar pañales…
Esa mujer, llega el día de su parto, y tiene dolor. Porque en muchísimas ocasiones el parto implica tener dolor. Forma parte del proceso natural de dar a luz. Y esa mujer te aprieta la mano. Y resopla. Y a veces grita.
Y cuando grita, te pide perdón por gritar; y cuando se le duermen las piernas por la epidural, y hay que ayudarle a moverlas, te pide perdón por hacerte “trabajar”; y te pide perdón cuando se le escapa un poco de pis; y te pide perdón de nuevo cuando tienes que ir a ajustarle muchas veces el monitor porque el bebé se está moviendo.
Y pide perdón una vez. Y cientos de veces. Sin darse cuenta de que está haciendo una de las cosas más impresionantes que podemos hacer, y que a veces grite, resople, o se le escape un poco de pis, es normal.
¿Cuándo se nos ha inculcado que teníamos que sentirnos culpables por ser humanos y por tener respuestas humanas?
Vosotras nos pedís perdón, y yo os doy las gracias por dejarnos estar presentes en esa obra de arte de la que sois artistas.
Mujeres del mundo, personas del mundo, sois espectaculares.
Arranca o traballo de parto
Claves do plan de parto
Agora que xa coñecemos o que é un Plan de Parto, temos que comezar a elaboralo. O Ministerio indícanos que a mellor data para realízalo é entre as semanas 28 e 32, xa que o parto é próximo e axudarános a ir “entrando en situación”.
Debemos recordar que o Plan de Parto é unha guía da muller para os profesionais sobre cómo quere que se desenvolva o seu parto na medida do posible, pero que en todo caso, se pode ir modificando xa sexa porque os desexos da muller cambien como por circunstancias médicas imprevistas (como no caso dunha urxencia vital, tratando de informar á muller en todo momento).
Non permite a elección de prácticas desaconselladas pola evidencia científica, é decir, todo aquelo que xa saibamos que é contraproducente, non podemos ofertárvolo, xa que incurriríamos en mala práxis. Trátase de que as eleccións sexan sempre en base a prácticas seguras.
Cando ir ó hospital?
Esta probablemente é unha pregunta que toda embarazada se fai, cando saberei que estou de parto?
É habitual que as mulleres acudan ó hospital en etapas moi temperás do traballo de parto, e especialmente en primíparas (mulleres para as que é o primeiro parto) a primeira etapa de parto latente ou preparto, pode durar bastantes horas.
O mellor lugar para que o preparto se desenvolva dentro da normalidade é o propio fogar, xa que no hospital hai factores que poden producir máis ansiedade na muller e dificultar o proceso que se está desenvolvendo.
Entramos nun lugar que na mayoría das ocasións descoñecemos, atopámonos con moita xente vestida de branco e azul. Uns cables por aquí e por alá, unha exploración, un termómetro, tensión…facemos un montón de cousas! Porque por suposto, se vides, asegurámonos de que todo esté ben…pero o certo é que nunha muller sana,o lóxico é que isto sexa así.
Diversos estudos compararon os resultados dos partos das mulleres que acudiron ó hospital en fase activa vs fase latente (preparto), e revelaron que as mulleres que acudiron en fase latente tiveron unha fase activa máis lenta, maior uso de oxitocina, maior uso de anestesia epidural, maior número de recén nacidos intubados tras o nacemento, e maior infección posparto.
En resume,a evidencia dinos que a admisión na fase temperá do parto asociase a unha maior duración e a un maior intervencionismo por parte dos profesionais.
As recomendacións actuáis indícannos que unha muller debería ingresar en traballo de parto cando a dinámica uterina é regular (máis ou menos 3 a 4 contracc
ións en 10 minutos, controladas durante 30 minutos), o borramento cervical é de polo menos o 50% (o cérvix está acortado a metade) e a dilatación é de 3-4 cm.
Que quere dicir que son contraccións de preparto?
Que todavía son irregulares, que están preparando ó corpo para o traballo de parto e que todo se está “poñendo en marcha”. Non quere dicir que o parto vaia a ser inminente, nin nós podemos estimar cando comezará o parto propiamente establecido, nin cando vai a nacer o bebé.
A veces estas contraccións comezan e paran ó meterse na bañeira para relaxarse, dannos un descanso, permítennos durmir, e o parto desencadease ó día seguinte.
Outras veces van aumentando a súa frecuencia e regularizanse pouco a pouco ata convertirse en “contraccións de parto”.
‘E se rompe a bolsa amniótica antes de ter contraccións?’
É frecuente que as contraccións non se perciban en etapas temperás do parto, pero “xa van facendo”, polo que cunha destas contraccións a bolsa amniótica que recubría ó bebé, rechea de líquido amniótico, rompe, e comeza a deixar sair o líquido.
O máis habitual é que por ti soa te poñas de parto, polo que dependendo do protocolo hospitalario, se cumpres unha serie de requisitos poderían darche o alta durante unhas horas tras comprobar que tanto o bebé coma ti estades ben. Tras esas horas, se non te puxeche de parto, deberás ingresar no centro para iniciar a profilaxe antibiótica (adminístrase antibiótico á nai para evitar que o bebé, que non ten a protección da súa bolsa que o mantiña estéril, contraia algunha enfermidade infecciosa), e, de novo dependendo do centro, o máis habitual é que tras superar un marxe de horas se induzca o parto (tema do que falarei noutras entradas).
‘Porque sangro?’
O sangrado que non nos debe alertar é un pequeño manchado, que nos indica que o cérvix se está dilatando.
O cuello do útero está borrándose (acortándose) e dilatándose (abrindo) para deixar pasar a cabeciña e o corpo do bebé, e esta zoa está moi vascularizada (presenta moitos vasos sanguíneos na súa superficie), polo que este proceso fai que se sangre un pouquiño.
Un sangrado coma unha regla si debería ser un motivo polo que viñerades a visitarnos. O máis probable é que non sexa nada, pero debemos asegurarnos de que así sexa.
Cando se considera que unha muller está de parto?
O principal consenso consiste en indicar que estamos ante un traballo de parto se hai entre 3 e 4 contraccións en 10 minutos, cunha intensidade similar, a dilatación é de 3 cm, o cuello do útero está borrado (finiño), centrado (posicionase dende atrás hacia diante) e brando (consistencia branda que permite a dilatación).
Pero isto non quere dicir que xusto nese preciso instante que a muller pasa a estar de 2 cm a 3 cm algo transcendental pase no seu corpo, simplemente trátase dun proceso progresivo no que o corpo da muller se vai adaptando e preparando para a saída do bebé.
‘Entón que fago se comezo con contraccións irregulares, a bolsa está íntegra, o meu embarazo tivo un desenvolvemento normal e me atopo ben?’
Tratar de descansar se che apetece descansar, e moverte se prefires moverte. O movemento facilita que o bebé se encaixe correctamente na pelvis materna, e habitualmente axuda a tolerar mellor as contraccións.
Pero se o teu corpo che pide que descanses, é posible que encher a bañeira con auga quente e sumerxirte nela che axude a aliviar a dor. O auga quente axuda a que se relaxen os músculos e é posible que a intensidade das contraccións diminúa, permitíndoche incluso durmir unhas horas.
Podes comer e beber se tes fame ou sede.
‘Creo que xa estou de parto, quero ir para o hospital’
Se crees que o momento do parto se acerca, sempre podes vir para que che indiquemos un pouquiño en que etapa nos parece que te atopas, e decidiremos se debes quedar con nós ou se ainda poderías esperar unhas horas a vir se ti así o decides.
E se é o momento de quedarte, poderás facelo acompañada. Ista é unha das primeiras preguntas que se fan no Plan de parto, e é moi importante, porque esa persoa que te acompañe terá o único privilexio de estar ó teu lado nun día moi especial.
Esta persoa debe ser alguén que aporte tranquilidade, e sería convinte que tamén sepa que esperar do parto ou como poderá axudar.
Outra das preguntas que nos fai o Plan de parto é a relativa a creencias, relixión, idioma ou calquera outra circunstancia que nos queiras transmitir.
Tamén se da a opción de traer a roupa que queirades, aínda que o habitual é que a muller empregue a roupa hospitalaria, se por calquera motivo desexades empregar a vosa vestimenta, podedes facelo.
Que pasa co persoal en formación?
A maioría dos hospitais do territorio nacional son universitarios, polo que é moi normal ver a grupos de estudantes ou a profesionais moi novos en formación e a algunhas persoas pode resultárlles incómodo.
Antes de nada, quero explicarvos un pouquiño que diferenza hay entre estudantes e residentes:
- Os estudantes de enfermaría, medicina, TCAE,… son alumnos da universidade que están a realizar prácticas relativas ós seus estudos, sempre supervisados de forma directa.
- Os residentes de enfermaría, medicina, farmacia, psicoloxía,… son graduados que unha vez finalizada a súa carreira fixeron un exame para acceder durante uns anos (dependendo da especialidades poden ser 2, 3, 4 e 5 anos) a un plan de especialización, son traballadores do hospital, pero tamén son supervisados por especialistas, ainda que non sempre de forma directa, xa que van adquirindo competencias progresivamente.
Se te incomoda que haxa persoal en formación na túa atención, sempre podes solicitar que non estemos presentes. Darános moita pena non poder acompañarte, pero eres libre de escoller como vivir o teu parto.
A importancia da información
A partir do século XVIII o parto deixou de ser un fenómeno natural e fisiolóxico para pasar a formar parte da carteira de servicios dos hospitais de forma progresiva. Isto permitiu que se salvasen miles e miles de vidas daquelas mulleres con problemas para parir, ou con algunha patoloxía previa que poñía en perigo a súa saúde e a do seu bebé.
Así mesmo, a mellora nas condicións hixiénicas e nutricionais mellorou a saúde das mulleres embarazadas de forma sustancial, diminuíndo o seu risco para desenvolver complicacións na súa xestación; e a detección temperá das patoloxías permítenos limitar o seu impacto.
Pero todo implica uns “pros” e uns “contras”, e a medicalización do parto non é allea a esta lei.
O feito de trasladar o parto ós hospitais implicou que a visión do mesmo fose mudando, chegando a convertirse case nun mero trámite e nun acontecemento vivido con pánico.
Algunhas mulleres desexan chegar ó hospital e que os sanitarios fagan ‘maxia’ e lles entreguen a un bebé limpiño e vestido, nunha hora, e o certo é que un parto non é nin moito menos iso. Esta visión do parto pode ser tremendamente perigosa, no sentido de que unha muller que quere que “teñan o bebé por ela” é unha muller indefensa; unha muller que non vai a informarse dos procedementos que se van a levar a cabo e en definitiva, que se está deixando nas mans dos profesionais, que deben decidir por ela.
Unha muller desinformada terá medo e o medo é o peor inimigo dos partos.
Pensade por un momento nos animais. Se algunha de vós tivo a sorte de ver o nacemento duns gatiños, ou de calquera outro animal, observaría que estes tenden a refuxiarse para parir. É excepcional que o fagan “no medio da nada”, onde calquera depredador podería aparecer e matalas, a elas e ás súas crías. O máis habitual é que os animais esperen incluso á caida da noite e busquen a máxima tranquilidade para que se poñan en marcha os mecanísmos que desencadenarán que teñamos no mundo algunha que outra nova vida.
Creo que isto ten moito que ver coa nosa falta de poder. Cremos que nós non sabemos, que nós non temos ese poder de decidir, e de novo, que nós non podemos. Non podemos parir. Necesitamos que nos axuden. E o certo é que non é así. Non na inmensa maioría dos partos.
Eu sempre digo que nós só “estamos por alí”, por se pasa algo. Porque é certo que os partos pódense complicar. Poden poñer en risco a vida da nai e do bebé.
Calcúlase que aproximadamente 830 mulleres morren ó día no mundo por problemas relacionados co embarazo e co parto, máis do 99% destas mulleres viven en países en vías de desenvolvemento, cunhas condicións hixiénico-sanitarias moi limitadas, e cuns controis do embarazo canto menos pobres.
O parto polo tanto é un momento crítico no que unha adecuada atención pode salvar moitas vidas.
Pero tamén é un momento crítico no que se xeran vínculos esenciais na vida desa nova familia que se forma: o bebé por primeira vez respira, por primeira vez mira á cara de súa nai, por primeira vez mama, por primeira vez escoita o latido do corazón dende fora,… e a nai por primeira vez ve esa cariña que leva 9 meses imaxinando, e xerase nela un instínto de protección sobre a súa cría que a levará a coidar dela pase o que pase.
E para que isto ocurra, tamén hai moito que facer. Tanto como para salvar vidas. Porque que as vidas sexan sanas (en todas as dimensións) é tan importante como que as vidas sexan.
É certo que o que máis quere toda muller embarazada é un bebé sano. Pero, sen ningún pero? Asumindo calquer prezo?
Durante moitos anos a atención hospitalaria baseouse nun “todo por el paciente, pero sin el paciente” que pouco a pouco se vai modificando. A Ley 41/2002 do 14 de novembro básica reguladora da Autonomía do Paciente foi un importantísimo avance a nivel legal que nos deixaba claro a todos que o poder de decisión reside no paciente. As transicións son complicadas, pero a día de hoxe quero pensar que a meirande parte dos profesionais sanitarios temos claro que a nosa función é a de asesorar con respecto as diferentes opcións terapéuticas (ou non terapéuticas no campo que tocamos hoxe) para que aqueles a quenes atendemos decidan de forma libre qué queren que pase cos seus corpos.
Con esta idea naceu o Plan de parto e nacemento.
Empoderamento.
Pode que a primeira vez que alguén vos fale nunha consulta do plan de parto vos ensine unhas follas para rechear con cousas como “quen queres que te acompañe durante o teu parto?” ou “enema si ou enema non”. Non vos tomedes o Plan de parto coma un mero trámite que debades cumplimentar sen pensar, debería ser a vosa referencia para comezar a valorar cómo pode ser o voso parto, que riscos pode haber, que decisións vades a ter que tomar, e porqué vades a tomalas.
Pode que teña dor durante o parto,…como vou a xestionalo? De que ferramentas dispoño? Hai métodos farmacolóxicos e non farmacolóxicos? Pode que queira poñer a epidural,…que riscos ten? Teño que cumplir algún requisito?
Sorprenderíavos saber a cantidade de veces que ó ir poñer o suero previo á epidural (un suero limpo que se pon para manter a tensión porque a epidural pode baixala) as mulleres me preguntan que si eso é xa a epidural! Como permites por escrito algo que non sabes en que consiste?
Gustaríame empregar bañeira durante a dilatación, creo que podería virme ben… no meu hospital de referencia hai bañeira? Cal é a súa política con respecto á mesma? Poido ter o meu expulsivo na bañeira ou só a dilatación? Que posibles inconvintes ten?
No documento do Plan de parto e nacemento do SERGAS recóllense algúns dos aspectos máis importantes sobre os que deberíades reflexionar e informarvos. Os profesionais só queremos acompañarvos neste día tan importante e estaremos atentos por se algo se sae do “normal”.
Nalgúns hospitais púxose en marcha unha consulta de Plan de Parto, noutros ofrécese unha charla ás mamás que queiran asistir e noutros ofrécese información sobre o mesmo nas consultas de Atención Primaria. Nunca substitúe á información que vos daremos os profesionais durante a atención ó parto, pero é preciso que haxa unhas “bases” previas á chegada ó paritorio, xa que nese momento os nervios e a falta de tempo xogan na nosa contra.
Porque, e se teño unha cesárea, poderá o pai facer contacto pel con pel? Poido dar o peito de todas formas?
As dúbidas son moi diversas.
Así mesmo, o feito de que ós profesionais se nos empezase a cuestionar, fíxonos replantearnos o paradigma da atención hospitalaria ó parto. Froito disto a atención de hoxe en día dista moito daquela do século pasado. Porque todo se mellora, e pouco a pouco entre todos iso é o que queremos: limitar aquelas accións innecesarias para permitírvos ter un parto seguro e humano. Humano, precisamente permitíndonos ser un pouco animais, deixando de tecnificar o que non é preciso tecnificar e intervir únicamente cando sexa imprescindible para garantir a vosa seguridade e sempre respectando a vosa opinión.
Cando non se pode cumplir algún dos puntos do Plan de parto da muller, como pode suceder nunha situación de urxencia, sempre se deberá manter á muller informada dos motivos polos cales se tenen que tomar decisións contrarias a priori co que aporta no Plan.
Ó longo das seguintes entradas iréivos contando punto por punto que é o que sabemos ata agora para que vós sexades as que tomedes as decisións que consideredes oportunas.
Cada muller e cada parto é único, e así o son as decisións sobre o mesmo.
Porque o corpo é voso. E o parto tamén.
O plan de parto e nacemento
Reelaborado en 2017, o ‘Plan de parto e nacemento’ é o documento a través do cal as mulleres nos manifestan os seus desexos, necesidades, preferencias e expectativas en relación ó nacemento dos seus bebés ós profesionais que as acompañaremos durante o seu traballo de parto
Nel descríbense as diferentes eleccións que a muller pode facer con respecto ó proceso do parto e explícase brevemente a evidencia que existe sobre cada punto.
Foi elaborado por profesionais do SERGAS baseándose no propio do MSSI, e aínda que non substitúe á información que poidan proporcionar os profesionais durante a súa atención, si é unha boa maneira de comezar a reflexionar sobre qué vai a pasar nese día tan importante no que lle daremos a benvida a unha nova persoa.
Estar informada é ter máis poder de decisión sobre o teu parto! É importante que todas as mulleres entendan que o parto é seu, que son as principais protagonistas, e que está na súa man a meirande parte da evolución do mesmo.
Ó longo das próximas entradas iréivos achegando este documento, xa que me parece unha boa forma de falar de moitas cuestións que algunhas de vós me preguntáchedes a nivel individual, como os enemas, a episiotomía, e en xeral, sobre que é iso dun traballo de parto.
Podedes ir botándolle un ollo na propia páxina do Sergas!
A epidural e as tatuaxes lumbares
Durante anos se nos viña contando a todas que iso de facer unha tatuaxe na parte baixa da espalda, ou zoa lumbar, nos podería limitar á hora de precisar anestesia epidural ou raquídea, xa fora para o parto ou para outras intervencións.
Hoxe vouvos contar un pouco do que sabemos actualmente sobre ese tema, aproveitando que esta mesma semana tiven un caso.
Como saberedes, a epidural é unha das técnicas analxésicas farmacolóxicas máis empregadas no noso medio para o alivio da dor tan habitual nos partos, e falar dela requerirame máis dunha entrada, polo que hoxe vamos a limitarnos a solventar a duda de “poido poñer a epidural se teño unha tatuaxe na zoa lumbar?”
A resposta é si.
O motivo polo que hai anos se rexeitaba de forma automática ás mulleres con tatuaxes nesa zoa ten que ver con que se demostrou que, ó puncionar, podemos arrastrar parte da tinta cara partes máis profundas, descoñecendo os riscos que isto podería producir, xa que non existen estudos cos que “sentar bases” ó respecto. Este risco daríase non só cunha punción destas características, se non que é posible que os potenciais riscos fosen os mesmos para unha punción pola inserción dunha vía venosa se hai unha tatuaxe enriba, ou se hai que poñer unha vacuna nunha zoa tatuada.
Pero a inmensa maioría das tatuaxes non son imaxes sólidas, o máis habitual é que haxa certas zoas libres de tinta, e aí reside a “clave” do si. Rara vez non se podería atopar unha zoa libre de tinta para puncionar.
¿E se é así? ¿E se a miña tatuaxe ocupa toda a zoa lumbar con tinta? Nese caso, non temos aínda que tirar a toalla, aínda temos unha segunda opción: tras administrar a anestesia local (que se pon sempre antes de inserir o catéter) poderíase facer unha incisión con bisturí, de forma que accedamos ó texido subcutáneo, onde xa non haxa tinta que poida ser arrastrada a planos máis profundos, para posteriormente inserir o catéter a este nivel.
Deixovos a imaxe tomada na sala de epidurais, sempre co permiso tanto da muller coma do anestesista que estaba a realizar a técnica. Entre todos, queremos achegarvos un pouquiño do que facemos!
Bibliografía
Zipori Y, Jakobi P, Solt I, Abecassis P. The need for an epidural “window of opportunity” in pregnant women with a lumbar tattoo. Int J Obstet Anesth. 2017 Sep 21. pii: S0959-289X(17)30230-3. doi: 10.1016/j.ijoa.2017.09.002. [Epub ahead of print] Review. PubMed PMID: 29146017.
Welliver D, Welliver M, Carroll T, James P. Lumbar epidural catheter placement in the presence of low back tattoos: a review of the safety concerns. AANA J. 2010 Jun;78(3):197-201. Review. PubMed PMID: 20572405.
Raynaud L, Mercier FJ, Auroy Y, Benhamou D; SOS ALR.. [Epidural anaesthesia and lumbar tattoo: what to do?]. Ann Fr Anesth Reanim. 2006 Jan;25(1):71-3. Epub 2005 Dec 28. French. PubMed PMID: 16386402
Douglas MJ, Swenerton JE. Epidural anesthesia in three parturients with lumbar tattoos: a review of possible implications. Can J Anaesth. 2002 Dec;49(10):1057-60. PubMed PMID: 12477678.
As mulleres defectuosas.
Empecei a residencia alá por maio, e outra das cousas que máis me sorprende a día de hoxe é a cantidade de mulleres que responden “Si, si poido quería” á pregunta de “Vas dar o peito?”.
Eu ao principio asustábame, claro, non coñecía ningún monstruo que viñera quitarlles o leite ás mamás das tetiñas, nin nunca estudara ningunha alerta de saúde a nivel mundial que me falara de que as mulleres se estaban quedando sin leite. Vaia faena! Menos mal que as mulleres se quedaran sen leite agora, pensaba eu, que xa temos leite artificial, para que as nosas crías sobrevivan, se chega a ser fai uns anos houbéramonos extinguido!
E claro, eu seguín cas miñas indagacións sobre as mulleres que só daban o peito si podían. E seguín preguntando, porque dí meu avó que se preguntas quedas de parva unha vez, pero se non, quedas de parva toda a vida. E preguntaba e preguntaba…e resulta que non había tal monstruo. Nin ningunha alerta mundial sobre hipogalactia… E entón seguín preguntando e preguntado para chegar a algunhas conclusións:
Resulta que as mulleres, hoxe en día, tenen o leite aguado. Tamén hai outras que é que lles pasan os gases polo leite ós seus bebés, e iso, e tremendamente malo. Outras mamás simplemente é que non tenen leite, que xa súas nais non tiñan e moito choraban porque se sentían fatal criándoas porque ben as vían, que non engordaban ben, xa llo dicía todo o mundo.
Algunhas mamás é que tenen os pezóns que non valen para mamar. E outras tenen moi pouco peito, entón non lles chega ós seus bebés. Outras mentres tanto tenen demasiado, entón é demasiado graso, e ós seus bebés non lles gusta.
Atopei tantas e tantas mamás que tiñan algún defecto, que estiven a piques de escribirlle á OMS. Cómo era posible que estivese a pasar algo tan tan grave e ninguén tomase medidas? Acabo de acabar a carreira e a min ninguén me falou desta amenaza da hipogalactia!
Pero recapacitei…e antes de escribirlle a ninguén seguín pensando… que cousa máis rara que só as tetas veñan mal agora de fábrica…
Pregúntome que pensaría unha adolescente si lle preguntase se vai a ser capaz de menstruar. Ou a un adulto que leva tempo feliz, se sería capaz de chorar. A ver se ten lagrimais ou non. Porque pode non telos. Terei que ter coidado agora se lle pido a alguén a hora por se non ten brazo onde levar o reloxo. Porque pode non telo.
Non sei, eu empezo a pensar que isto de que as mulleres non teñan leite igual ten que ver co tema de que as mulleres somos un pouco defectuosas. Sempre o fumos.
Tes olleiras, maquíllate. Tes pelo nas axilas, depílate. Tes estrías, cúbreas. Tes peitos, suxetaos. Tes barriga, ponte a dieta. Tes pouca altura, pon tacóns. Tes a cintura ancha, encorsétate. Tes un mal día, sorríe.
Con todos istos requerimentos, o raro sería, que tendo dúas tetas, puideramos dar leite así, sen máis. Sen ningún produto! Ala! Como se fose o natural! Como se fose o máis normal do mundo vaia! Que unha muller amamante!
Que non nos quiten ningún dereito máis. Que este, tamén é noso.
Gracias á marabillosa mamá que me permiteu acompañala no seu parto e compartir con vós esta preciosa fotografía sobre a lactancia.
O perdón das mulleres
Veño observando dende que estou no paritorio, un sitio no que entro en contacto con como mínimo 3 ou 4 mulleres embarazadas ó día, máis con todas aquelas enormes compañeiras, dende matronas, xinecólogas, celadoras, auxiliares, limpiadoras,…a meirande (meirandísima) parte, mulleres, algo que quero compartir. Tamén teño grandísimos compañeiros que son homes, por suposto. Pero hoxe quero falar das mulleres. Quero escribir sobre o perdón das mulleres.
As mulleres, ese ser marabilloso que durante unhas 37 semanas prestou o seu corpo a unha nova persoa, para que se puidese convertir en tal. Que ven coas pernas moitas veces hinchadas, edematosas, á que lle costa camiñar. Que estivo durante 12 semanas con vómitos cada mañá, se limpaba a cara, e se ía traballar. Que tomaba rigurosamente as súas vitaminas, que non tomaba nin unha caña a pesar do moito que lle apetecía, que se cansou de repetir “por favor, non fumedes aquí, que lle fai mal ó neno”. Que estaba 10 horas na barra do bar con camisetas holgadas e a espalda cargada. Que estaba tecleando en frente do ordenador e pensando nos números para mercar os pañales…
Esa muller, chega o día do seu parto, e ten dor. Porque en moitísimas ocasións o parto implica ter dor. Forma parte do proceso natural de dar a luz. E esa muller, aprétache a man. E resopla. E a veces berra.
E cando berra, pídeche perdón por berrar; e cando se lle durmen as pernas pola epidural, e hai que axudarlle a movelas, pídeche perdón por facerche “traballar”; e pídeche perdón cando se lle escapa un pouco de pis; e pídeche perdón cando lle tes que ir a axustar moitas veces o monitor porque o bebé se está movendo.
E píde perdón unha vez. E un cento delas. Sen darse conta de que está a facer unha das cousas máis impresionantes que podemos facer e que que a veces berre, resople, ou se lle escape un pouco de pis é normal.
¿Cando se nos inculcou que tiñamos sentirnos culpables por ser humanos e ter respostas humanas?
Vós pedídesnos perdón; e eu douvos as gracias por deixarnos estar presentes nesa obra de arte da que sodes as artistas.
Mulleres do mundo, persoas do mundo, sodes espectaculares.